• Página 1 de 9


    Profecías

    Introducción

        En esta serie de interesantes profecías, he seleccionado las más fidedignas fuentes de información, para así mostrar lo que está pasando actualmente en el planeta Tierra. He tratado de explicar cada una de estas profecías cuidadosa y minuciosamente, para que así podamos darnos cuenta que estamos viviendo en una era de gran evolución espiritual llamada Kali Yuga, la cual es un periodo de gran transformación espiritual, donde el sufrimiento juega un papel importante como un catalizador para que exista la reflexión, el entendimiento y la evolución del alma. Es asombroso el descubrir la enorme similitud entre estas diferentes profecías relativas al ‘Final de los Tiempos’, a pesar de haberse generado en distintos países y en épocas diferentes.

        Durante miles de años, la gente de este mundo ha esperado un Mesías que venga a redimir al mundo. El tiempo ha llegado, pues estamos al final de una gran etapa y al comienzo de otra que se caracteriza por un alto despertar de la conciencia y una renovación espiritual muy profunda. En esta Nueva Era, surge la esperanza de la llegada de un Enviado Divino, cuya doctrina salvará al mundo del colapso y la destrucción y cuyos preceptos y enseñanzas cambiarán dramáticamente el camino evolutivo de la humanidad, corrigiendo los errores del pasado. Este nuevo conocimiento espiritual se cimentará a grado tal que

  • Página 2 de 9


    reinará en el mundo eternamente. En el pasado muchos Enviados Divinos han fallado en su intento por corregir los errores en la espiritualidad, por lo que es necesario que un Gran Ser venga al mundo a rectificar nuestro camino y a establecer el correcto Sanatana Dharma –Ley Espiritual que deberá reinar por siempre-.

        Durante siglos, la llegada de un gran Enviado Divino ha sido profetizada, no tan solo por los cristianos, sino por devotos de varias religiones alrededor del mundo. En oriente se habla del Bodhisattva o el Señor Maitreya, quien renacerá en el futuro para restablecer la doctrina. Para los musulmanes él es el Iman Mahdi, el Mesías que aparecerá al ‘Final de los Tiempos’ para restituir un reino de paz y rectitud.

        La doctrina de salvadores, mesías, avatares, mensajeros divinos y maestros universales, la podemos encontrar en todas las escrituras alrededor del mundo. En el cristianismo, Cristo mencionó, ‘Y yo rogaré al Padre, y Él os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre’. Esto significa que un ser de elevado nivel espiritual deberá venir al mundo para mostrarnos una nueva enseñanza espiritual acorde con el Yugadharma –Código Divino imperante en una era determinada- y este conocimiento gobernará por toda la eternidad, corrigiendo el camino errado en el que nos encontramos ahora. Es de vital importancia la corrección y aceptación de un nuevo camino dado a través de un Gran Ser.

  • Página 3 de 9


        La Biblia cristiana contiene muchas profecías concernientes al futuro de la humanidad. El libro del Apocalipsis o Revelación habla extensamente acerca del retorno de Jesucristo a la Tierra, del ‘Final de los Tiempos’, así como de la aparición del anticristo y de una batalla masiva en Armagedón que ocasionará la pérdida de millones de vidas.

        De acuerdo a las escrituras hinduistas, en el Bhagavad Gita, Sri Krishna expone lo siguiente: ‘Siempre que el bien decae extinguiéndose poco a poco, predominando en su lugar la maldad y el orgullo, Mi Espíritu se manifiesta en forma humana sobre esta Tierra. Para salvar a aquéllos que hacen el bien y destruir a aquéllos que actúan con maldad, para así restablecer el reino de la Verdad, Yo vengo a este mundo era tras era’. (Bhagavad Gita, Capítulo IV, Sutra 7, 8).

        Los judíos continúan esperando la llegada de su Mesías, nombre dado por ellos al futuro salvador de la humanidad.

        Nostradamus, famoso médico y astrólogo quien escribió Centurias en 1555, libro de profecías, señala julio de 1999 como la fecha cuando dará inicio una gran conflagración.

        Con respecto al ‘Final de los Tiempos’, Edgar Cayce, hombre célebre con grandes poderes psíquicos y proféticos y que vivió en este siglo, predijo grandes cambios en la Tierra, tales como gigantescos terremotos. Mencionó que se daría una transición espiritual muy importante, dando comienzo en 1958

  • Página 4 de 9


    y concluyendo en 1998. Cayce también manifestó que ‘cuando este periodo termine, entonces la Nueva Era daría comienzo y el Gran Iniciado vendría’. El se refería obviamente al redentor de la humanidad. Todo esto nos muestra que estamos viviendo al final de una era y al inicio de otra muy importante época.

        Este periodo que abarca 40 años sería para la purificación de la humanidad, donde el sufrimiento estaría a la orden del día, en forma de terremotos, inundaciones, enfermedades nuevas, hambruna, guerras, etc. Todo esto ayudaría a purificar a la humanidad y a entender el nuevo conocimiento espiritual que nos debe ser dado, a través de un Gran Ser, enviado por el Creador al ‘Final de los Tiempos’.

        Vivimos en una era llena de materialismo, donde lo más importante es el dinero, los bienes materiales, el sexo, la belleza, el poder y una alta posición en la sociedad. Pocos de nosotros ni siquiera llegamos a darnos cuenta de que algo anda mal en nuestra forma de vida. Violencia, guerras, desastres, plagas, hambruna, terrorismo, etc., se nos hacen tan comunes, que algunos de nosotros las vemos con cierta frialdad o indiferencia, pues hemos perdido la capacidad de ser movidos por este tipo de acontecimientos. En esta época tan particular, existe un incremento en la oscuridad –maldad- en la gente.

        Buda, quien fue un gran místico hindú y fundador del budismo, dijo a sus discípulos que cada veinticinco siglos se presenta un periodo de intenso caos, cuando la Rueda del Dharma –rueda de la Ley Espiritual- comienza una nueva

  • Página 5 de 9


    rotación. Esta información se encuentra plasmada en el Sutra de Diamante. Dicho sufrimiento es necesario para que el hombre vuelva sus ojos hacia Dios y pueda evolucionar espiritualmente de una mejor manera. Hombres de un alto calibre espiritual nacen en esta maravillosa era. Buda, fundador del budismo; Mahavira, fundador del jainismo; Sócrates, Platón, Aristóteles y Pitágoras –grandes filósofos griegos-; Zaratustra, fundador del Zoroastrianismo; Lao Tsé, fundador del Taoísmo; Chuang Tzu, gran pensador de la filosofía clásica china; y Kanchi Sosan, gran maestro Zen. Todos estos grandes seres nacieron aproximadamente hace dos mil quinientos años. Buda predijo que la próxima rotación de la Rueda del Dharma sería testigo de un cambio en el hombre sin precedentes, de una magnitud nunca antes presente en la historia de las especies. Estamos precisamente viviendo en esta era de un Gran Despertar Espiritual.

        Siete años atrás, estando en el Ashram Santhigiri –situado en Pothencode, Trivandrum, en el sur de la India, yo, Carlos Guzmán, tuve una visión espiritual en la que percibí una gran Luz que envolvía al Ashram. Un año después, estando en el mismo lugar, pude apreciar que esta Luz era más blanca y más luminosa, por lo que llegué a pensar que la gente que vivía en ese lugar tan especial, estaba evolucionando mucho más rápido que la gente que vivía fuera del Ashram. Sin embargo, en ese momento escuché una voz que me aclaraba que efectivamente el Ashram tenía una Gracia muy especial y además que la

  • Página 6 de 9


    evolución en el planeta Tierra se estaba dando a un ritmo muy dinámico, sin precedentes. Pude ver que la Tierra tenía un aura o resplandor a su derredor y que en el futuro, poco a poco, esta Luz incrementaría su brillantez. No podemos ni siquiera imaginar la enorme importancia que tiene la era en la que vivimos actualmente. Debemos recordar, tal como lo predijo Buda, que cada veinticinco siglos grandes seres encarnan con el propósito de corregir nuestro camino espiritual, con el propósito de guiarnos hacia la liberación espiritual. Vivimos exactamente en esta era, un zenit en el proceso evolutivo del ser. Aurobindo, gran filósofo hindú, indicó en su libro que el 24 de noviembre de 1926 fue la fecha cuando Krishna descendió al plano físico. Sri Aurobindo Ghosh se encontraba en un trance meditativo en ese día y al salir de éste, participó esta información a sus discípulos.

        El descenso del tremendo raudal de la Luz supramental fue el 24 de noviembre de 1926, y aproximadamente nueve meses –doscientos ochenta y dos días- después de la visión espiritual de Aurobindo Ghosh con respecto al descenso de un gran ser, el Gurú Navajyothisri Karunakara nació –primero de septiembre de 1927-. Esos doscientos ochenta y dos días, es el tiempo que dura un embarazo desde la concepción hasta el alumbramiento.

        De acuerdo a las escrituras hinduistas, el año 3102 AC marca el inicio de las eras materialistas, iniciándose Kaliyuga, era en la cual nació Sri Krishna.

        Egipto creó un nuevo sistema para contar los días, principiando con Narmer

  • Página 7 de 9


    Menes, primer faraón egipcio. La fecha de inicio fue aproximadamente en el año 3100 AC. De acuerdo a la Gran Pirámide de Egipto, el 17 de septiembre del 2001 es el tiempo en el que se dará una importante transición espiritual en este mundo.

        Los mayas tienen un calendario en el cual cuentan sus días a partir de una fecha de inicio, llamada el nacimiento de Venus, la cual corresponde al 13 de agosto del 3114 AC. Ellos tenían la firme creencia que, principiando con el nacimiento de Venus, después de trece de estos periodos de 400 años llamados baktunes, el mundo llegaría a su fin, –más de 5100 años después-, el 22 de diciembre del 2012 DC. Esta fecha señala el final de la era del Jaguar, el quinto y último de los cinco soles mayas. Esta fecha representa para la humanidad un proceso de renovación espiritual sumamente especial donde una nueva era se inicia.

        Es impactante darnos cuenta de la gran similitud en las fechas y profecías dadas por los videntes hindúes, egipcios y mayas, sin embargo debo aclarar que no está próximo el fin del mundo, tal como lo han interpretado erróneamente algunas personas. Éste es el final de un periodo en el cual la humanidad será juzgada por el buen o mal comportamiento que ha tenido en base a sus pensamientos, palabras y acciones. Aquello que sembremos, ineludiblemente lo vamos a cosechar, tarde o temprano, fundamentado en la famosa e inviolable ley de observancia universal llamada la Ley de Causa y

  • Página 8 de 9


    Efecto. Los efectos de un pensamiento, palabra o acción, en ciertas ocasiones son inmediatos, pero en algunos otros casos, días, meses, años o algunas encarnaciones deben pasar para que las consecuencias de nuestras acciones se hagan realidad. El momento exacto es determinado por nuestro Creador. Todo acontecimiento en la vida de una persona es el resultado de sus acciones pasadas, en otras palabras, sus acciones, pensamientos y palabras son causas que tendrán efectos futuros en la forma de eventos diversos. Cuando generamos un pensamiento, generalmente éste es seguido por palabras y acciones, por lo que inevitablemente experimentaremos la consecuencia de ello. Por ejemplo, si una persona actúa incorrectamente, entonces cosechará consecuencias negativas, en forma de enfermedades, accidentes, dificultades, o cualquier tipo de sufrimiento que venga a ella. Por el contrario, si un hombre actúa correctamente, entonces cosechará cosas buenas para su ser.

        El fruto o recompensa que puedes tener como producto de cualquier acción será directamente proporcional a la pureza o calidad de tu acción, así como al amor y al sacrificio depositado en ella.

        El sufrimiento hace al hombre volver sus ojos hacia Dios, dándole la oportunidad de crecer espiritualmente. En algunos casos, la gente se ve afectada por algún tipo de enfermedad al llegar a determinada edad. Por otra parte puedes ver a personas que nacen ciegos, sordos, mudos o con enfermedades terribles debido a sus pasadas erradas acciones. El karmagedi

  • Página 9 de 9


    –registro localizado en el alma de toda acción tanto positiva como negativa- puede fructificar inmediatamente o quedar almacenado en el alma, sin embargo tarde o temprano, la resultante será gozo o dolor. Ésta es una ley universal que opera constante y consistentemente en toda situación, en todo lugar y en todo nivel de la Creación. Nada ni nadie escapa a su rango de acción.

        En los Upanishads –escrituras filosóficas hindúes-, se ha hecho hincapié en el hecho que toda alma humana es esencialmente divina, sin embargo esta divinidad se haya eclipsada y ensombrecida por una capa de suciedad creada por la mente. Esto nos lleva a darnos cuenta que es muy importante el tratar de generar siempre pensamientos positivos, pues ellos por consiguiente, te conducirán a generar palabras y acciones correctas, que al ser repetidas en numerosas ocasiones crearán buenos hábitos en tu persona, los cuales en numerosas vidas culminarán en tendencias o inclinaciones –vasanas- correctas que se harán patentes a lo largo de tu existencia. Si por el contrario, actuamos erradamente, entonces generaremos vasanas negativos que nos conducirán ineludiblemente a un caos en nuestra evolución espiritual.

    Siguiente capítulo: Kaliyuga, Universo y Evolución

    ¿Alguna pregunta?